Por FEDEVAL, PERÚ
El 8 de marzo se celebra el “Día Internacional de la Mujer”, día de reconocimiento a la mujer como creadora y a su lucha por la liberación y la igualdad. En este día, reafirmamos también nuestro compromiso con las trabajadoras autónomas para implementar políticas de igualdad entre mujeres y hombres. FEDEVAL quiere fortalecer el desarrollo de un modelo social más justo e igualitario en derechos, en el empleo y el autoempleo, en la participación económica y en la sociedad.
![]() |
![]() |
![]() |
![]() |
"La historia de la lucha de las mujeres por la igualdad no pertenece a ninguna feminista ni a ninguna organización, sino al esfuerzo colectivo de todos los que nos preocupamos por los derechos humanos".
Mujeres, abuelas, madres, hijas, nietas, sobrinas, el 8 de marzo es vuestro día. Es un día para recordar el papel y la dignidad de la mujer en el proceso de toma de conciencia de la humanidad sobre su valor en la sociedad. Es un día para reivindicar y destacar la importancia de la acción de la mujer en todos los ámbitos de la vida.
Un día no es suficiente para celebrar una lucha cotidiana, constante e incansable. Un día es poco para reconocer la participación de las mujeres en la construcción de una familia, en la conquista del mercado de trabajo, en la lucha por la libertad de pensamiento y de elección, para alcanzar el lugar al que tienen derecho.
Exigimos también más derechos: conseguir un lugar en la política para la redistribución justa de la riqueza, porque todavía hay una proporción muy elevada de mujeres que permanecen en la economía informal, donde las mujeres siguen siendo mayoría; la necesidad de lograr una de sus reivindicaciones más antiguas: la igualdad de derecho a oportunidades de trabajo decente; necesitamos más instalaciones de cuidado infantil para que las mujeres no tengan que elegir entre la maternidad y el trabajo remunerado.
Este día dedicado a la mujer trabajadora, se debe a un trágico incidente ocurrido en el barrio de Manhattan en Estados Unidos en 1908, cuando más de un centenar de mujeres, que trabajaban en una empresa textil, murieron mientras realizaban una huelga para reclamar más seguridad y mejores condiciones de salud laboral, y contra los bajos salarios. Acordaron hacer huelga como protesta por sus precarias condiciones laborales. Era la primera vez que las mujeres se unían para reclamar mejoras en las condiciones laborales y, por ende, sus derechos. Exigían una reducción de la jornada laboral, que era de 16 horas a 10 horas diarias. Además, además de trabajar esas horas, recibían solo un tercio del salario que se pagaba a los hombres.
Su rebelión fue reprimida con violencia, con el resultado de 129 muertes en incendios en el interior de la fábrica. Muchos años después, en 1910, durante una Conferencia Internacional de Mujeres celebrada en Dinamarca, surgió la idea de crear una fecha específica para honrar a las trabajadoras asesinadas en la fábrica textil. En 1975, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) decidió celebrar el 8 de marzo como Día Internacional de la Mujer Trabajadora.